Quizá lo que me ocurre es que estoy cansado, tan cansado, que ya no puedo nisiquiera demostrarle a alguien lo que realmente pienso de la vida. Soy viejo en originalidad, he perdido la alegría de inventar. Soy un perro que se arrastra por su mediocridad...
Un poema interesante, para aquellos que luchan dia a dia contra algo tangible:
Más allá de la noche que me cubre
negra como el abismo insondable,
doy gracias a los dioses que pudieran existir
por mi alma invicta.
En las azarosas garras de las circunstancias
nunca me he lamentado ni he pestañeado.
Sometido a los golpes del destino
mi cabeza está ensangrentada, pero erguida.
Más allá de este lugar de cólera y lágrimas
donde yace el Horror de la Sombra,
la amenaza de los años
me encuentra, y me econtrará, sin miedo.
No importa cuán estrecho sea el portal,
cuán cargada de castigos la sentencia,
soy el amo de mi destino:
soy el capitán de mi alma.
Ernest Henley
miércoles, 3 de febrero de 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Cuando iba a contestarte no sabía en q blog hacerlo, pero al final me he decantado x este, q me ha gustado el poema. Tiene mérito mantener 3 blogs a la vez!
ResponderEliminarRespecto a lo de la memoria ahora mismo sólo pienso en ella de forma fisiológica. Pienso en el hipocampo, en el córtex y en todas las estructuras cerebrales que se encargan de consolidarla, culpa de las asignaturas que tengo... xD Pero sí que es cierto que a medida que crecemos almacenamos menos detalles, si no preguntando a cualquier yaya o yayo y te podrá contar montones de anécdotas de su infancia y juventud, y muchas menos de su edad adulta. Yo espero que no extinga nunca esa fascinación por los pequeños detalles que me caracteriza, perdería una de las cosas que más me gustan de mí misma.
Respecto a Scorpions has dado en el clavo, esas son también las dos canciones que más me gustan de ellos =)
se extinga**
ResponderEliminar